¿Te encantan las plantas, pero eres de esas personas que no saben cómo cuidarlas? ¿Eres de esas personas que hasta los cactus mueren? Entonces  necesitas leer estas recomendaciones para empezar a tener los mejores cactus del mundo cuidados con tus propias manos.

Si hay plantas en la tierra que son fáciles de cuidar, conservar y cuidar, son las suculentas y los cactus. Pero a pesar de su nobleza, existen diferentes  condiciones que debes tener en cuenta para que crezcan fuertes y con gran vitalidad.

A continuación, le daremos  un resumen de varias cosas que a veces hacemos mal  y que hacen que nuestros cactus se sequen, se pudran y mueran.

Lista de cosas que hacemos mal con nuestros cactus:

Sabemos que los cactus son de la familia de las suculentas y por eso son muy resistentes, crecen en zonas desérticas, por lo que no requieren mucha agua, pero a pesar de ello hay que saber mantenerlas.

1 – No vaciamos

Aunque, como decíamos, los cactus no requieren mucha agua, se debe regar. Pero muchas veces se nos ocurre  poner nuestra planta en una maceta, pero nos olvidamos de hacer el agujero  para que cuando eso suceda, el agua tenga por dónde escapar si lo hemos hecho en exceso. Si no hemos escurrido, el agua se acumulará en la maceta e incluso se pudrirá, por lo que las raíces harán lo mismo y nuestros cactus morirán.

2 – La regamos más de lo debido

A menudo tenemos una variedad de plantas en nuestro espacio, incluidos los cactus. Por eso por la noche cuando  salimos a regar, lo hacemos de manera uniforme en todas nuestras plantas. Olvidamos que los cactus son aguas bajas. Esta es otra de las grandes molestias que matan a nuestros amiguitos. Siempre hay que tener en cuenta que los cactus se riegan poco, incluso una vez cada quince días.

3 – Exceso de sol

Aunque sabemos que los cactus provienen de zonas desérticas, eso no significa que estas plantas necesiten un exceso de sol. Nuestros cactus , por el contrario,  necesitan sol, pero también sombra para protegerse. Cuando notas que tu cactus muestra manchas o quemaduras, te advierte que el sol lo está dañando. Muévelo y verás qué rápido se fortalece.

4 – Nunca un plato en el fondo de la olla

Las plantas en general necesitan un medio que las hidrate más rápido, pero este no es el caso de los cactus. Si colocas un plato debajo de la maceta de tus cactus, harás que se acumule agua y mantengas la tierra permanentemente húmeda,  lo que provocará que las raíces se pudran y por ende tus cactus también. Por lo tanto, la maceta debe quedar libre, con buen drenaje y solo así lograrás que tu cactus crezca sano y fuerte.

5 – El hecho de que haya falta de agua no significa que no se deba regar

Para saber si tu cactus está seco  , mira si comienza a arrugarse o cambia de color y se vuelve amarillo o marrón. Esto es un indicio de que hay una falta urgente de agua. Para saber si es necesario regar o no, lo único que tienes que hacer es colocar un palo de madera en el suelo y al sacarlo verás si sale seco o con un poco de humedad. Si sale mojado, no lo riegues, pero si sale seco, necesita agua. Todo esto se puede revertir.

Si la sequía no es grave, basta con regarla y observar que la tierra absorbe bastante líquido, sin encharcarla. Si la sequía es severa debes considerar trasplantarla a una maceta nueva con muy buen sustrato y tierra nueva y colocarla en un área que no le dé el sol directamente, después de varios días notarás que va cambiando y comienza a crecer sana, regarlo con mucho cuidado.