
La cocina es el corazón del hogar , el lugar donde se preparan delicias y se comparten momentos especiales con amigos y familiares. Y una cocina bien organizada es fundamental para que el acto de cocinar sea más agradable y eficiente.
Uno de los pasos clave para lograr este objetivo es organizar la despensa según los métodos sugeridos por los expertos en pedidos , para transformar la cocina en un oasis funcional. Veamos juntos cómo.
¿Por qué organizar la despensa?
Antes de profundizar en los detalles de los métodos, es importante comprender por qué debería dedicar tiempo y energía a organizar su despensa .
Una despensa desorganizada puede generar una serie de inconvenientes, entre ellos:
- Dificultad para encontrar ingredientes : si los ingredientes están dispersos de forma caótica, es posible que tengas que buscar durante mucho tiempo para encontrar lo que necesitas. Esto puede ralentizar el proceso de preparación de alimentos y provocar frustración.
- Desperdicio de alimentos : Cuando los ingredientes se esconden u olvidan en la despensa, es más probable que caduquen o queden inutilizables. Esto puede provocar un desperdicio de alimentos y dinero.
- Falta de inspiración : Una despensa desorganizada puede dificultar ver el potencial de los ingredientes que tienes a mano. Una despensa bien organizada puede inspirarte a preparar platos nuevos y creativos.
- Desorden visual : El desorden en la despensa puede crear una sensación de caos en la cocina. Organizándolo se puede conseguir un ambiente más limpio y armonioso.
¿Cómo organizar la despensa?
Ahora que entendemos la importancia de organizar la despensa, veamos qué pasos se deben seguir para implementar un método de organización que te ayudará a lograr excelentes resultados en cuanto a orden y limpieza .
Paso 1: Vaciar la despensa
El primer paso fundamental es vaciar por completo la despensa . Retire todos los alimentos y objetos que se hayan acumulado con el tiempo.
Luego procede a limpiar los muebles con un paño húmedo, para tener un espacio limpio y fragante desde el que empezar a trabajar.
Paso 2: categorizar los alimentos
Después de vaciar la despensa, empieza a categorizar los alimentos según el tipo y la frecuencia de uso . Algunas categorías comunes incluyen:
- Productos secos como pasta, arroz, harina y cereales.
- Productos lácteos como leche en polvo, yogures y quesos curados.
- Productos enlatados como tomates pelados, frijoles y atún enlatado.
- Especias y condimentos .
- Bocadillos y dulces .
- Productos horneados como harina y azúcar.
- Productos para el desayuno como cereales y mermeladas.
Paso 3: elija los contenedores adecuados
Ahora que ya has categorizado los alimentos, consigue recipientes adecuados para almacenarlos. Los transparentes son ideales, ya que permiten ver fácilmente lo que contiene cada uno.
Puedes utilizar tarros de cristal, cajas de plástico transparente o recipientes metálicos . Asegúrese de que los recipientes sean herméticos para mantener los alimentos frescos por más tiempo.
Paso 4: Etiqueta
Etiqueta los envases con el nombre del alimento y la fecha de vencimiento . Este último paso es especialmente importante si tiras las cajas en las que compraste los alimentos, de lo contrario ya no podrás rastrear la fecha de caducidad.
El etiquetado te ayudará a identificar rápidamente los ingredientes cuando los necesites , para que no tengas que perder el tiempo buscándolos siempre.
Paso 5: Organícese inteligentemente
Ahora que ya tienes tus contenedores etiquetados, organiza tu despensa estratégicamente . Aquí hay algunas sugerencias:
- Coloca los alimentos más utilizados al alcance de la mano , a una altura cómoda, para que no tengas que luchar para recuperarlos.
- Agrupe alimentos similares . Por ejemplo, coloque todas las especias juntas.
- Utiliza estanterías o estantes para aprovechar al máximo el espacio vertical , para no sobrecargar ni un solo estante.
- Mantenga los ingredientes más pesados o voluminosos en el fondo de la despensa , por una cuestión de practicidad, pero también de seguridad.
Paso 6: Revisar periódicamente
Una vez organizada la despensa, el trabajo aún no está terminado: de hecho, es importante encontrar un método para preservar y mantener el orden en el tiempo.
A continuación se detallan algunas pautas a seguir para lograr este objetivo:
- Practica rotar los alimentos , colocando los más viejos delante de los más nuevos para consumirlos primero.
- Haz una revisión periódica de la despensa para eliminar alimentos vencidos o sin usar .
- Mantenga su etiquetado actualizado .
Siguiendo estas sencillas instrucciones verás que empezarás a obtener numerosos beneficios en cuanto a ahorro de tiempo , porque encontrarás todo más rápido, y también de dinero , porque evitarás comprar ingredientes que ya tienes en casa, desperdiciandolos.
Mantener la despensa ordenada es más fácil de lo que parece y te hará experimentar una mejor relación con tu entorno y el tiempo que pasas en la cocina.